Wanda Nara y Mauro Icardi vuelven a estar en el centro de la escena debido a un nuevo escándalo que tuvo lugar el pasado viernes por la noche en el lujoso edificio Chateau Libertador.
El conflicto se desató cuando el futbolista llegó al lugar para recoger a sus hijas, lo que desencadenó una acalorada discusión. La situación se tornó cada vez más tensa, con gritos que alertaron a los presentes y obligaron a la intervención de la policía para controlar el enfrentamiento.
Luego del tenso enfrentamiento con su expareja, Mauro Icardi abandonó el lugar de manera inapropiada, conduciendo en contramano para alejarse rápidamente del edificio. Su salida tuvo un nivel de tensión muy fuerte, dejando en evidencia que la situación había escalado hasta un punto crítico.
Como consecuencia de este nuevo episodio de conflicto, las tres abogadas que representaban a Icardi, Elba Marcovecchio, Guadalupe Guerrero y Lara Piro, decidieron dar un paso al costado y renunciar a su defensa. Mientras tanto, Wanda Nara cuenta con un botón antipánico, una medida de seguridad implementada ante la creciente conflictividad en la relación con el futbolista.
LA POSTURA DE L-GANTE
Contrario a lo que muchos esperaban, L-Gante decidió mantenerse completamente al margen del conflicto entre Wanda e Icardi. Fuentes cercanas al cantante aseguran que no ha hecho declaraciones sobre el tema ni ha mostrado interés en involucrarse en la polémica.
El cantante de cumbia 420 no opinó del escándalo y se dedicó a compartir contenido sobre su carrera, promocionó un sorteo para sus fanáticos e incluso hasta se sacó una selfie en frente al espejo a pura sonrisa.
Esta fría y distante actitud por parte de L-Gante alimenta aún más los rumores sobre una fuerte crisis en su noviazgo con Wanda Nara.
Todo indica que el cantante prefiere que su nombre esté relacionado con su música y no con polémicas ajenas. Esta estrategia claramente podría beneficiarlo a largo plazo, evitando que su imagen se vea afectada por los constantes escándalos en los que se ha visto envuelto todo este tiempo.