Jorge Macri quiere que, si sos adulto y trabajador, y no pudiste terminar el secundario o nunca lo empezaste, no tengas esa oportunidad. El programa de educación de la Ciudad de Buenos Aires llamado “Adultos 2000”, es un programa a distancia diseñado para jóvenes y adultos que permite al alumno comenzar o retomar sus estudios secundarios y obtener el Título de Bachiller con validez nacional bajo las Resoluciones 1536/98 y 1386/03, desde cualquier lugar del país.
El plan de estudios consta de 26 materias, se estima un mínimo de 2 años y medio para completarlo, permitiendo al estudiante anotarse a 3 materias por turno y rendir cada 3 meses. No hay límite de tiempo para cursar las materias y tampoco hay un mínimo de materias a cursar por año. En el caso de que el alumno tenga materias aprobadas del secundario en cualquier otra institución, se aplicará un sistema de equivalencias respecto del documento analítico que presenten.
Sus docentes y delegados denuncian que en Adultos 2000, Jorge Macri avanza en la quita y reubicación de horas desmantelando equipos enteros de trabajo. Denuncian cambios constantes en el calendario educativo quitando previsibilidad y planificación a las diversas tareas y a la cursada a distancia, interviniendo personal externo al programa en tareas cotidianas sin explicación alguna ni fundamentación.
Para colmo, por primera vez en los más de 25 años del programa, cerraron la sede central dejando a más de la mitad de trabajadores sin sede de trabajo presencial y enviando a parte del equipo a trabajar a otra sede, impidiendo el normal desempeño de tareas, dado que se dificulta el trabajo intersectorial necesario. Dicho cierre equivale a que director, vice, secretario/a y preceptores se encuentren trabajando sin contacto con docentes y estudiantes, más el desmantelamiento del patrimonio de la institución, sufriendo pérdidas significativas de mobiliario, equipos tecnológicos, etc.
A su vez, no se cubren licencias, ni se cubren las horas de quienes se jubilan o renuncian. Lo que se traduce en sobrecarga de tareas de los equipos que deben asumir las tareas de los cargos no cubiertos con las horas y cargos que quedan (más de 250 horas cátedra sin cubrir). Es un ajuste por goteo. Por último y como hicieron en varios niveles modificaron de manera inconsulta a espaldas de las y los trabajadores, la coordinación del programa, el nuevo plan de estudios recientemente aprobado y con validez nacional recortando asignaturas.
La convocatoria de la comunidad educativa del programa Adultos 2000 no es un hecho aislado. Un día antes, el martes 1, harán paro las y los trabajadores de Primera Infancia, que vienen denunciando la falta de renovación de contratos a los referentes territoriales claves para el funcionamiento de los jardines donde asisten niños y niñas de los barrios vulnerables. El paro será acompañado por el sindicato Ademys. Por otra parte, INTEC continúa trabajando bajo condiciones de alta precarización, con contratos basura transitorios.
El conflicto comienza a resonar más allá de las comunidades del programa. A través de la red social X, Federico Puy, secretario de Prensa de Ademys, expresó su respaldo al paro de Adultos 2000 y llamó a enfrentar unidos el ajuste que atraviesa a todos los programas socioeducativos.
Adultos 2000 es un programa muy valioso, que permite a jóvenes y adultos empezar a estudiar si no lo hicieron o retomar sus estudios y obtener el título de Bachiller un título que tiene validez nacional. Es un ataque a los derechos de sus docentes y de toda persona que quiera… pic.twitter.com/hSNbIX9LS1
— Federico Puy (@fedepuy) June 28, 2025
También se pronunció Myriam Bregman, diputada nacional (MC), del PTS-Frente de Izquierda, quien afirmó acompañar esta lucha.
¡Todo nuestro apoyo y acompañamiento a esta lucha! pic.twitter.com/lK66dLPjHE
— Myriam Bregman (@myriambregman) June 28, 2025
Frente a este escenario de fragmentación y vaciamiento que se puede evidenciar en varios programas que forman parte del área socioeducativa, es necesario que emerja una coordinación desde abajo entre trabajadores de los distintos programas y con el conjunto de los niveles donde se desempeñan. Solo la lucha conjunta de docentes, familias, organizaciones sociales y sindicatos rodeando de solidaridad estas luchas y acompañándolas, podrá hacer que triunfen. La defensa de cada programa es parte de la defensa integral de la escuela pública. Solo con unidad, coordinación y lucha desde las bases se puede frenar esta avanzada que busca una educación al servicio del mercado, con trabajadores precarizados y estudiantes sin derechos y para que lo tomen en sus manos todos los sindicatos docentes.